Emésis y regurgitación
También conocido como vomito, se define como una expulsión
forzada de la comida contenida en la cavidad estomacal, este proceso
fisiológico se encuentra mediado por el sistema nervioso autónomo y somático.
En el caso de reptiles se presenta el vomito de material con apariencia relativamente
fresca o semidigerida, en el caso de tortugas y cocodrilos el vomito o regurgitación es raro por lo tanto
cuando ocurre implica un problema subyacente mas grave.
La regurgitación se considera un proceso común y pasivo en reptiles, asociado principalmente al manejo, este ocurre en los momentos posteriores a la alimentación con la expulsion de material fresco o poco digerido.
Contenido semidigerido común en emesis. |
Cuando el vomito se encuentra asociado con diarrea es un signo común
de una gran variedad de problemas gastrointestinales. Un animal con problemas
de vomito crónico presentara desequilibrios acido-base y electrolíticos, estas
son las primeras atenciones medicas que hay que atender.
Entre los principales desencadenantes de vomito por causas
asociadas al manejo podemos encontrar:
- Consumo de cantidades grandes de comida, esto es más común en ofidios que pueden consumir hasta el 30% de su peso vivo en una sola ocasión.
- Temperaturas inadecuadamente bajas, mas de 6 grados por debajo de la temperatura óptima de mantenimiento disminuye en gran medida el proceso digestivo.
- Algunas serpientes de carácter nervioso y sin un refugio pueden vomitar si existen disturbios medio ambientales
- Cuando se lleva a cabo algún manejo que implica la manipulación directa de los ejemplares hasta aun par de días después de comer.
Entre las causas infecciosas mas comunes se encuentran:
- Parásitos incluidos cestodos, ascaridos, cryptosporidiosis y amibas.
- Se asocia a la enfermedad de cuerpos de inclusión en boidos(IBD)
- Pancreatitis, peritonitis, piometra, gastroenteritis e infecciones con Clamydophila spp.
Otras causas:
- Lesiones esofágicas, faríngeas, orales como estomatitis, esofagitis, neoplasias, laceraciones esofágicas.
- Obstrucciones por cuerpos extraños, neoplasias o granulomas en sistema digestivo.
- Intoxicaciones con organofosforados u otros pesticidas, alimentos medicados, drogas como apomorfina, levamisol o xylacina.
Insecticida organofosforado de uso veterinario. |
El diagnostico se realiza ante la observación del material
expulsado durante la emésis o regurgitación que generalmente presenta un olor
pestilente en el terrario o encierro de nuestras mascotas, la diferenciación se
lleva a cabo basándonos en la historia clínica y la evaluación de los factores
externos que rodean al espécimen.
El tratamiento pocas veces va enfocado al frenado del vomito
como tal, si no al diagnostico y corrección del problema que origino el mismo.
En casos de vomito severo donde las complicaciones de hidratación y desbalances
electrolíticos sean severos se puede optar por la administración de solución ringer
lactato vía parenteral. El uso de antieméticos como la metoclopramida puede ayudar a
reducir el vomito.
Presentación comercial de metoclopramida en solución inyectable. |